Sunday, September 28, 2008

Gracias

Hoy tengo roto el corazón. Escribo entre lágrimas, recién recibida la noticia de que el mayor de los Arenas, uno de los pilares más sólidos de El Corral de Piedra, el de verdad, nos ha dejado. No puedo seguir. Son demasiados golpes en poco tiempo. Y la aldea cada vez está más vacía.

Friday, September 26, 2008

Sobre el cortejo

Me pregunto dónde reside lo que hace a las personas afines. No es una pregunta banal, ni vacía por las horas a las que surge. Es en realidad una reflexión en voz alta que aspira a convertirse en respuesta, a sabiendas de lo imposible de tamaña empresa cuando todo depende de lo muy diversos y diferentes que somos todos. Pero uno alza la vista y observa cómo la vida rompe una y otra vez esa constante absurda para dar lugar a realidades tangibles como esas que algunos de ustedes gozan ahí afuera... y me reafirmo en mi vertiente positiva. Sólo un segundo, eso sí.
Salgo. Me relaciono. Hablo, respondo, pregunto, incluso me cohibo si la ocasión no invita al atrevimiento. Y al final uno se percata de lo vacuo de todo. O sea, sé positivamente que el mundo, en lo que a conocer gente se refiere, es tan variopinto como lo es girar una bola del ídem y señalar con el dedo al azar esperando encontrar en la punta del mismo nuestra casa... demasiado fortuito. Pero es que al final, después de todo eso, después de optimismos desacerbados, inconformistas noches de autosugestión inducida, y numerosos momentos de etílica efervescencia, lo que queda es demasiado obvio. Todo es tristemente predecible: una ola de engreídos despechos informes, ridículos momentos de injustificada satisfacción por un rechazo que sólo se basa en lo evidente, ignorando el universo que se aposta en una sugerente segunda fila. La coherencia invita a mantenerse al margen porque nos sabemos mucho más que todo ello, o al menos más de lo que se nos incita a creer que somos, pero la realidad a menudo no responde a lo marcado por sus parámetros, y nos recluimos en nosotros mismos tratando de asimilar lo que a todas luces nos parece absurdo. Y nos parece absurdo porque lo es. ¿De qué otra manera podría calificarse la negación de intentar enriquecerse con lo que tienen que ofrecer esos que nos rodean, nos atraen y nos llenan de luz con sus diferencias?
No es mi intención entrar en disquisiciones sobre géneros, aceptaciones sociales de las diferencias entre sexos, o motivaciones varias relativas a las relaciones que se establecen entre hombres y mujeres cuando el momento del cortejo cobra relevancia en el panorama común que unos y otros comparten. Pero parece evidente que, por motivos sociales mayoritariamente, quizás también culturales, la posición de la mujer respecto del hombre en las lides amatorias es cuanto menos privilegiada. En realidad uno puede llegar a justificar desde un punto de vista naturalista semejante realidad, aduciendo en esencia a la necesidad inherente a toda especie de perpetuar la misma intentando que las generaciones encargadas de ello sean en la medida de lo posible superiores a las que les llevaron a ocupar el lugar que ocupan. Ahí, en esa perspectiva lógica y genética, se justifican muchas de las situaciones que tan a menudo observamos en el mal llamado cortejo humano. Pero ocurre, seamos honestos, que además de biología somos mente. Sí, de acuerdo, la mente también tiene base biológica, pero lo que de ella emana en forma de pensamiento cobra una dimensión que se aleja de lo físico para convertirse en un privilegio abstracto del que carecen los demás seres vivos -esos seres vivos que se esfuerzan en perpetuar la especie eligiendo a los elementos más perfectos basándose exclusivamente en lo que ven.
Y ahí es donde me refugio para pensar que en todo este maremagnum de idas y venidas, de acercamientos y metafóricas bofetadas, hay mucho más de banal hipocresía que de razones darwinianas. Mi cuaderno de campo rebosa de apuntes en los que se narra el mismo proceso una y otra vez: el mismo momento de duda e indecisión, el mismo momento de absurdo valor para entablar conversación -absurdo, señores, porque hablamos de hablar, sólo de eso-, el mismo momento de intercambio fugaz, el mismo momento de rechazo soberbio. Las partes, obviamente, pueden ustedes figurárselas. La mujer, desde su atalaya, goza de una visión periférica del entorno, y su posición privilegiada le concede la ventaja de la última palabra, que al final es la que vale. Tal circunstancia no tendría por qué ser un problema -una de las dos partes ha de jugar ese rol, necesariamente-, de no ser porque la estadística en ese sentido es demoledora. Siempre es ella la que elige, siempre ellos los que se acercan. Lo triste es ver cómo algo tan biológico, como decíamos, tan justificable desde lo natural, falla en lo más esencial de todo: los argumentos. No se repara en lo que se dice, ni en cómo se dice, ni en lo que se piensa, o se hace. Nada de indagar en las dudas, las reflexiones, las inquietudes, las opiniones. Poco importan la honestidad, la inteligencia, la capacidad de abstracción, la imaginación. Al final lo que cuenta es el tamaño de la cornamenta, el vivo color del plumaje, la gracilidad en el baile del cortejo. Nos resumimos, esa es la triste realidad, a pura biología animal.
Visto lo visto, en conclusión, a uno le dan ganas de irse a pastar al campo o a cazar antílopes a la sabana -con una paradita previa en el gimnasio, eso sí, que nosotros, a diferencia de las bestias, tenemos la oportunidad de mejorar lo que nos dio "de serie" la madre naturaleza...

Tuesday, September 23, 2008

El toro de la vega

Con la reciente polémica sobre esta fiesta popular sita en Tordesillas (Valladolid), se reabre el debate sobre los festejos populares españoles que tienen como protagonistas a animales -me refiero a los de cuatro patas, de los otros prefiero no emitir juicio alguno. Desde la famosa cabra haciendo puenting, a los gansos descabezados por semejantes, pasando por toros embolaos -que no "en volaos", que en valenciano viene a ser algo así como "con chalaos"-, a la mar -¿existe acaso ser más acuático que el bóvido?-, y demás variantes.
Los responsables de las instituciones públicas de los diferentes municipios defienden su postura argumentando el respeto máximo con el que se llevan a cabo los festejos, siempre mirando por la integridad del animal y la seguridad general del espectáculo. Los defensores de la causa animal, por el contrario, condenan estas celebraciones por anacrónicas y crueles. Sea como fuere, lo cierto es que las imágenes muchas veces valen más que mil palabras, y a tenor de lo que estos días podemos ver en prensa y televisión, los bichos bien, bien, lo que se dice bien... no parecen pasarlo.

Sunday, September 21, 2008

Artesanos de la voz al servicio del pixel


El pasado jueves día 18 tuve la suerte de trasladarme en calidad de corresponsal de Meristation a uno de los más conocidos estudios de doblaje de videojuegos en Madrid para cubrir un evento organizado por Microsoft, en el que se recreaba una sesión de doblaje del esperado título Fable 2.
Tras el mismo, redacté y publiqué un artículo con aspiraciones de reportaje sobre el proceso en la revista, que a continuación os enlazo. El contenido es interesante y aporta curiosos y sorprendentes datos sobre lo que supone doblar un juego de esta magnitud. Dialogamos con Mayte Torres, reconocida actriz y directora, y el texto obtuvo muy buena respuesta por parte de los lectores, lo que debió contentar -aunque no era ése mi objetivo- a los señores de Microsoft. Por cierto, las fotos son cosa de Álvaro -y tienen su arte, todo hay que decirlo.

Lee el artículo en Meristation.com

Tuesday, September 16, 2008

Meripodcast, el podcast de Meristation


DESCARGAR MERIPODCAST 1, TEMPORADA 2

Estamos de estreno. Hoy se colgó oficialmente el piloto de la segunda temporada del podcast de Meristation, revista online de postín con quienes vengo colaborando desde hace aproximadamente un año. Y me complace anunciar a aquéllos que aún no estén al tanto que servidor se ocupa desde este primer programa de las labores de presentación del mismo. Es una aventura nueva e ilusionante que empieza hoy, y quiero invitaros a todos a compartirla conmigo, amiguetes del corral.
Cuando maese Nacho Ortiz me propuso la cuestión, sólo pude decirle que haría todo lo que estuviera en mi mano para ejercer de conductor de un espacio que la temporada pasada había sido número uno de descargas en iTunes en su categoría, con la mayor de las ilusiones. Sabía que sustituir a Jose de la Fuente, el anterior presentador del Meripodcast, sería una tarea ardua, difícilmente superable, pero pondría toda la carne en el asador para hacerlo, al menos, tan bien como él. Nunca he dudado de mi capacidad en estas lides y sigo convencido de que alcanzaremos cotas elevadas de calidad en esta nueva etapa. Pero lo cierto es que los principios son siempre complicados, que el nivel dejado por el anterior equipo de presentadores fue muy alto, y que sólo el rodaje proporciona la maestría en este, como en cualquier otro campo. Así las cosas, con todas las ilusiones puestas en esta nueva empresa, "parimos" este primer Meripodcast de la temporada, que hoy ve la luz.
Lo cierto es que las primeras respuestas de los foreros de la web a los cambios sufridos por el programa -que son también de índole técnica y no sólo personal- no han sido todo lo buenas que a uno le hubiese gustado leer. En realidad, los lectores más activos de la revista, esos que postean tras cualquier nuevo contenido, han sido bastante duros con muchas de las cuestiones nuevas del podcast: los presentadores -servidor y Almudena Tabernero-, la fluidez general de las intervenciones, la sensación de copy/paste de la edición, la calidad del sonido... Ha habido un poco de todo. Algunos tienen razón, y esas cosas que critican las vemos también los que hacemos el programa, aunque nosotros sabemos que en breve se subsanarán y no nos preocupan en exceso; y otros simplemente aprovechan el cambio para cebarse con cuestiones menores que con el tiempo y la comprensión general del público quedarán superadas, despreciando el contenido -tan fantástico y con colaboradores tan buenos como siempre- o la ilusión que este nuevo equipo está poniendo en mantener el altísimo nivel que el podcast dejó al acabar su temporada uno. Pero eso amigos, no es fácil. Aunque tampoco imposible y en breve podréis comprobarlo.
El año pasado Jose de la Fuente y Gemma Abasolo, los conductores del podcast -experimentados profesionales de la radiofórmula, a la sazón currantes de Radio Sabadell-, realizaban el programa en un estudio de radio de su emisora. Así, como es lógico, sus voces sonaban nítidas y cristalinas, si bien el resto de colaboradores se incorporaban al programa por vía telefónica y en comparación sus intervenciones resultaban inferiores en cuanto a calidad de audio. Bien, en esta nueva etapa, el sistema de grabación y edición es radicalmente distinto, por cuestiones obvias -si alguien tiene un estudio de radio a mano, que por favor se ponga en pie-, y aunque estamos trabajando para optimizar la fórmula y los medios, todo requiere un proceso y una experimentación que no surge de un día para otro. Lo que hoy suena regular o "raro", en breve sonará bien, o muy bien. Y lo que antes sonaba regular, como las intervenciones telefónicas, ahora suenan maravillosamente en comparación, porque -y eso sí es un mérito de esta nueva temporada en el que nadie parece haber reparado- los colaboradores entran ahora con calidad microfónica, nada de teléfonos. Pero bueno, asumimos que lo que la gente quiere en un conjunto óptimo... y en ello andamos.
Todo eso al margen, estoy seguro de que si os gustan los videojuegos y la radio, este primer programa no os defraudará. Hay muy buenos contenidos, alguna imitación y todo -eso también ha recibido críticas, cuando han estado ahí desde el principio de los tiempos en radio...lo que hace pensar que la gente no debe escuchar mucha- y además lo presento yo, que soy de la familia, como aquél que dice.
Os espero cada martes en meristation.com. Adieu!

Friday, September 05, 2008

La Conspiración del Pánico

DreamWorks Productions. Estreno, 17 de octubre de 2008. Y adivinad quién figura en el reparto de doblaje...

Os veo en los cines, amigos.